Una guía explica la metodología y resultados de una iniciativa en Guatemala para mejorar el aprendizaje y la calidad de vida de menores vulnerables

El 18 de octubre se presentó en la sede de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AACID) la guía práctica del proyecto “Mejora del rendimiento académico y la calidad de vida de menores vulnerables de Guatemala. Programa integral de estimulación cognitiva y emocional, desarrollo de huertos escolares y fortalecimiento de la docencia a distancia ante el reto del COVID-19”. La iniciativa ha sido implementada por la Fundación ETEA – Instituto de Desarrollo de la Universidad Loyola junto con Fe y Alegría Guatemala, con fondos de la AACID.

Momento del acto de presentación en la sede de la AACID

El evento fue inaugurado por Olga Pozo, jefa de la Unidad de Cooperación con Iberoamérica de la AACID, Karen Avendaño, subdirectora general de Fe y Alegría Guatemala, y Michela Accerenzi, coordinadora regional de Fundación ETEA. También intervinieron los investigadores de la Universidad Loyola, Joaquín Ibáñez, Pablo Rodríguez y José María Barroso, así como Ana Lucía Linares, coordinadora de Fe y Alegría Guatemala para proyecto, y Edilson Chun, director de las escuelas multigrado de Chiquimula.

Acto de presentación celebrado en Diputación de Córdoba

La experiencia del proyecto también se ha compartido en centros escolares, como SAFA Blanca Paloma (Sevilla) o el IES Guadalquivir (Córdoba). Asimismo, con motivo del Día Mundial de la Alimentación, el pasado 16 de octubre se presentó la guía práctica en un acto celebrado en la Diputación de Córdoba, que contó con la presencia de la delegada de Igualdad, Cooperación al Desarrollo, Consumo y Participación Ciudadana de la Diputación de Córdoba, Auxiliadora Moreno.

La tecnología en los procesos de aprendizaje

El uso de tecnologías de realidad virtual ha resultado un gran recurso para el complementar las técnicas tradicionales de desarrollo cognitivo, logrando importantes avances en procesos de comprensión lectora y de aprendizaje en general.

Según Karen Avendaño, “la estimulación implementada por medio de juegos interactivos y lecturas en horarios específicos y sistemáticos favorece al desarrollo y fortalecimiento de funciones cognitivas y gestión emocional”. Además, “el uso de dispositivos electrónicos como herramienta pedagógica en las escuelas promueve la educación tecnológica y acorta la brecha digital que está presente en estos sectores”, añade Avendaño.

El rol del huerto escolar en el aprendizaje

Ana Lucía Linares apuntaba que “el huerto escolar es una herramienta pedagógica que fomenta el aprendizaje significativo, social y promueve el cuidado del entorno”, incidiendo en que “detectar las carencias nutricionales en las comunidades educativas fue fundamental para la creación de los huertos escolares y los cultivos”.

La producción de huertos en las escuelas va más allá del aprendizaje sobre agricultura, de la educación en la alimentación saludable o de la mejorar la nutrición del alumnado.

Los huertos escolares son una oportunidad de convivencia y de creación de comunidad, involucrando a docentes, estudiantes y familias. Sirven para trabajar valores como la ecología, la agricultura sostenible y el trabajo en equipo.

La innovación docente, factor esencial en los procesos de enseñanza escolar

La actualización y capacitación del equipo docente en metodologías activas de enseñanza – que trabajan la gamificación, la motivación y la participación- garantizan mejores resultados en la educación de los estudiantes, ayudándolos a convertirse en los protagonistas de su propio aprendizaje.

Edilson Chun destacaba la relevancia de “dar prioridad a espacios de formación integral, pertinente y continua a los docentes para fortalecer la labor diaria”. Además, “utilizar el método de réplicas de formación por formadores/as es una estrategia que permite que todos los maestros del centro escolar puedan conocer y aplicar las diferentes estrategias para impartir sus materias”, aseguraba.

¿Cuál es la utilidad de esta guía?

Este documento guía es el resultado de un trabajo coordinado entre diferentes instituciones que actúan desde ámbitos como la educación, la psicología y la cooperación para el desarrollo. La información sobre el diagnóstico, la metodología y la implementación de esta experiencia de trabajo con menores que viven en situación de vulnerabilidad, a través del proyecto educativo de las escuelas, constituye una herramienta de transformación social y un valioso aprendizaje a compartir con profesionales y agentes del ámbito andaluz y nacional que trabajan en cooperación internacional.

La cooperación internacional para el desarrollo debe fortalecer su alianza con la investigación académica de mano de las universidades y las organizaciones de la sociedad civil, para poder continuar innovando y aumentando la eficacia y el impacto en las intervenciones de desarrollo.​